Para terminar con este síndrome tan peculiar, os dejamos un par de datos curiosos sobre él.
En primer lugar, y como ya se ha comentado, su nombre viene de la famosa historia, pero ¿a que no sabíais que el autor del libro sufría esta enfermedad? Pues bien, Lewis Carroll, se inspiró en su propia experiencia para escribir la historia, de ahí que la similitud entre la sintomatología y lo que le ocurre a la protagonista sea tan grande.
También se sabe que suele predominar en niños, que las migrañas pueden ser un factor desencadenante y que los episodios suelen ser por la noche, justo antes de quedarse dormidos, ya que hay poca luz y nuestro cerebro empieza a entrar en un leve estado de letargia. Lo más curioso, es que estos pacientes son totalmente conscientes de que lo que les sucede es una ilusión, pero en la mayoría de los casos, necesitan mirarse en un espejo para confirmar que es fruto de su cerebro.
Ya para terminar, os dejamos un pequeño vídeo que resume de manera bastante clara qué es este síndrome y qué perciben las personas que lo sufren. Esperamos que os gustase la patología de hoy, ¡para nosotras es una de las más interesantes!
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